La gripe tiene mucha capacidad de contagio, es decir, puede pasar de una persona a otra con facilidad como por ejemplo por unas gotitas de saliva que se escapen al hablar. Esto unido a que durante el embarazo el sistema inmunitario de la mujer está deprimido hace que las embarazadas sean más propensas a contagiarse por la gripe.
Los síntomas de la gripe durante el embarazo suelen comenzar con dolores musculares, malestar general y fiebre de más de 38ºC. Son síntomas muy parecidos a los de un catarro con la diferencia de que se presentan de forma muy rápida.
Un síntoma muy propio de la gripe es la molestia en los bronquios que suelen estar acompañados de tos. El cansancio es otro de los síntomas más característicos de la gripe. Ambos síntomas, tos y cansancio, pueden durar dos semanas tras desaparecer la fase aguda.
Una pregunta muy frecuente sobre la gripe y el embarazo es: ¿qué riesgos tiene para el bebé que la madre se contagie de gripe?
En primer lugar, debemos dejar claro que la gripe no se contagia al bebé ya que no pasa la barrera placentaria. En cambio, los síntomas sufridos por la madre sí pueden tener algunos efectos en el bebé si no se les presta atención.
La madre puede sufrir inapetencia, lo cual, si no se controla y no se hace un esfuerzo por comer, puede afectar al desarrollo del embarazo. En relación a esto, también está la deshidratación, que puede afectar al bebé. Tomando zumos, agua y crema de verduras se puede solucionar.
Es muy conveniente controlar la fiebre siguiendo las instrucciones que te haya dado tu médico y por supuesto, conviene no automedicarse. El mejor remedio para pasar la gripe será el reposo en casa para recuperarte lo antes y mejor posible.