Un dolor de cabeza es dolor o molestia en la zona de la cabeza o la cara. Los dolores de cabeza pueden ser de naturaleza única o recurrente, y localizarse en una o más áreas del cráneo.
¿Cuáles son las causas de los dolores de cabeza?
La causa exacta de los dolores de cabeza no se comprende completamente. Se cree que muchos dolores de cabeza son el resultado de tensión muscular y vasos sanguíneos dilatados o expandidos en la cabeza. Aunque anteriormente se pensaba que los dolores de cabeza por migraña se debían a vasos sanguíneos dilatados en el cerebro, las nuevas teorías sugieren que pueden estar involucrados cambios en los químicos del cerebro o la señalización eléctrica.
Otros dolores de cabeza pueden estar causados por una alteración en la comunicación entre partes del sistema nervioso que transmiten información sobre el dolor, proveniente del área de la cabeza, la cara y el cuello. La falta de sueño y la mala calidad del sueño son a menudo la causa de los dolores de cabeza crónicos. Ocasionalmente, hay un problema real en el cerebro, como un tumor o una malformación, aunque esto es muy raro.
La forma en que un niño muestra un dolor de cabeza puede estar relacionada con muchos factores, como la genética, las hormonas, el estrés, la dieta, los medicamentos y la deshidratación. Los dolores de cabeza recurrentes de cualquier tipo pueden causar problemas escolares, problemas de comportamiento y/o depresión.
¿Cuáles son los diferentes tipos de dolores de cabeza que existen?
Hay muchas formas diferentes de clasificar los dolores de cabeza. Un método divide los dolores de cabeza en dos categorías:
Dolores de cabeza primarios
Los dolores de cabeza denominados primarios generalmente están causados por tensión muscular, vasos sanguíneos dilatados, alteraciones en la comunicación entre partes del sistema nervioso o inflamación de las estructuras en el cerebro. Los dolores de cabeza primarios no están vinculados a otras afecciones médicas y se clasifican de la siguiente manera:
Migrañas
Las migrañas pueden comenzar desde muy temprano en la infancia. Se estima que casi el 20 por ciento de los adolescentes experimentan migrañas. La edad media de inicio es de 7 años para los niños, y de 10 años para las niñas. A menudo hay antecedentes familiares de migrañas. Algunas mujeres pueden tener migrañas que se correlacionan con sus períodos menstruales. Si bien cada niño puede experimentar los síntomas de manera diferente, los siguientes son los síntomas más comunes de una migraña:
- Dolor en uno o ambos lados de la cabeza (algunos niños más pequeños pueden quejarse de dolor por todas partes)
- La calidad del dolor puede ser palpitante o martilleante (aunque los niños pequeños pueden no ser capaces de describir su dolor)
- Sensibilidad a la luz o al sonido.
- Náuseas y / o vómitos.
- Malestar abdominal
- Sudoración
- El niño puede estar muy callado o pálido.
- Algunos niños tienen un aura antes de la migraña, como una sensación de luces intermitentes, un cambio de visión o sensación de olores raros
Cefaleas tensionales
Los dolores de cabeza por tensión son el tipo más común de dolor de cabeza. El estrés y el conflicto mental o emocional a menudo son factores que desencadenan el dolor relacionado con los dolores de cabeza tensionales. Si bien cada niño puede experimentar los síntomas de manera diferente, los siguientes son los síntomas más comunes de un dolor de una cefalea tensional:
- Inicio lento del dolor de cabeza.
- La cabeza generalmente duele en ambos lados
- El dolor es sordo o se siente como una banda alrededor de la cabeza.
- El dolor puede afectar la parte posterior de la cabeza o el cuello
- El dolor es de leve a moderado, pero no severo.
- Cambio en los hábitos de sueño del niño.
- Los niños con dolores de cabeza por tensión generalmente no experimentan náuseas, vómitos o sensibilidad a la luz.
Dolores de cabeza en racimo
Los dolores de cabeza en racimo generalmente comienzan en niños mayores de 10 años y son más comunes en varones adolescentes. Son mucho menos frecuentes que las migrañas o los dolores de cabeza tensionales. Los dolores de cabeza en racimo generalmente se dan con una frecuencia que puede durar semanas o meses, y esta serie de dolores de cabeza puede reaparecer cada año o dos. Si bien cada niño puede experimentar los síntomas de manera diferente, los siguientes son los síntomas más comunes de un dolor de cabeza en racimo:
- Dolor intenso en un lado de la cabeza, generalmente detrás de un ojo.
- El ojo afectado puede tener un párpado caído, pupila pequeña o enrojecimiento e hinchazón del párpado.
- Secreción nasal o congestión
- Hinchazón de la frente
Dolores de cabeza secundarios
Los dolores de cabeza secundarios tienen una causa orgánica en el cerebro (problemas en la estructura del cerebro) debido a otra condición de salud o enfermedad, y son el tipo menos común de dolores de cabeza.
¿Qué tipos de dolores de cabeza se asocian con enfermedades serias?
El niño puede tener diversos grados de síntomas asociados con la gravedad del dolor de cabeza, dependiendo del tipo de dolor. Algunos dolores de cabeza pueden ser más serios. Los síntomas que pueden sugerir una causa subyacente más grave del dolor de cabeza pueden incluir los siguientes:
- Un niño muy pequeño con dolor de cabeza.
- Un niño que se despierta por el dolor de cabeza.
- Dolores de cabeza que comienzan muy temprano por la mañana.
- Dolor que empeora por la tensión, como tos o estornudos.
- Episodios recurrentes de vómitos sin náuseas u otros signos de un virus estomacal.
- Inicio repentino de dolor
- Dolor de cabeza que se vuelve más severo o continuo.
- Cambios de personalidad que se dan a medida que evolucionó el dolor de cabeza
- Cambios en la visión
- Debilidad en los brazos o piernas, o problemas de equilibrio.
- Convulsiones o epilepsia
Los síntomas de un dolor de cabeza pueden parecerse a otras condiciones o problemas médicos. Siempre consulta con tu pediatra para un diagnóstico acertado.
¿Cómo se diagnostican los dolores de cabeza?
Es posible que no se detecte de inmediato el alcance total del problema, pero puede revelarse con una evaluación médica integral y pruebas de diagnóstico. El diagnóstico de un dolor de cabeza se realiza con un historial cuidadoso, un examen físico y pruebas de diagnóstico. Durante el examen, el médico elaborará un historial médico completo del niño y la familia.
Las preguntas más frecuentes durante el examen suelen ser:
- ¿Cuándo aparecen los dolores de cabeza?
- ¿Cuál es la ubicación del dolor de cabeza?
- ¿Cómo son los dolores de cabeza?
- ¿Cuánto duran los dolores de cabeza?
- ¿Ha habido cambios en los patrones de comportamiento o en la personalidad?
- ¿Los cambios en la posición o el estar sentado causan dolor de cabeza?
- ¿Tiene tu hijo problemas para dormir?
- ¿Tiene tu hijo antecedentes de estrés emocional?
- ¿Hay antecedentes de trauma en la cabeza o la cara de tu hijo?
Si el historial es consistente con migraña o cefaleas de tipo tensional y el examen neurológico es normal, puede que no sea necesario realizar más pruebas de diagnóstico.
Otras pruebas de diagnóstico pueden ser:
- Análisis de sangre. Estos pueden incluir un conteo sanguíneo completo, niveles de hierro y ferritina, y pruebas de función tiroidea.
- Resonancia magnética. Un procedimiento de diagnóstico que utiliza una combinación de imanes grandes, radiofrecuencias y un ordenador para producir imágenes detalladas de órganos y estructuras dentro del cuerpo.
- Tomografía por ordenador. Un procedimiento de diagnóstico por imágenes que combina rayos X y tecnología informática para producir imágenes horizontales o axiales (a menudo llamadas cortes) del cuerpo. Una tomografía por ordenador muestra imágenes detalladas de cualquier parte del cuerpo, incluidos los huesos, los músculos, la grasa y los órganos. Las tomografías son más detalladas que las radiografías generales.
- Polisomnograma. Esta es una prueba indolora que generalmente se realiza en un laboratorio del sueño. Implica registrar la respiración y los movimientos musculares. Un polisomnograma generalmente se realiza si hay una sugerencia de un trastorno del sueño, como la apnea del sueño u otro problema relacionado con el sueño.
Tratamientos para los dolores de cabeza
Los tratamientos específicos para los dolores de cabeza en niños deben examinarse, diagnosticarse y tratarse por un doctor en medicina especializado en neurología infantil basándose en:
- La edad del niño, salud general e historial médico
- Magnitud de las cefaleas
- Tipo de dolores de cabeza
- Tolerancia del niño a ciertos medicamentos, tratamientos o terapias
- Valoración de los padres
El objetivo final del tratamiento es frenar los dolores de cabeza. Para ello es necesario saber identificar el tipo de cefalea que padece el niño e iniciar un tratamiento acorde a sus necesidades. Estos tratamientos pueden incluir:
- Descansar en un lugar tranquilo y a oscuras
- Medicación (siempre prescrita por el especialista en neurología infantil)
- Terapia para el estrés
- Evitar posibles desencadenantes (comida, bebida, falta de sueño, ayuno)
- Cambios en la dieta
- Ejercicio
Es posible que las migrañas requieran medicación más especializada como:
- Medicamentos paliativos. Se toman en momentos puntuales de dolor o crisis
- Medicamentos preventivos. Se toman a diario para prevenir y controlar los dolores
Los dolores de cabeza en niños, aunque no sean muy frecuentes o intensos, son algo que hay que vigilar de cerca. Si tu hijo/a está experimentando cefaleas sin causa aparente, consulta con nuestros especialistas.